Para el estreno ha elegido a un gran escritor que ha frecuentado poco los escenarios de Madrid: Benito Pérez Galdós. Nunca leí ninguna de sus obras pero siempre he escuchado que sus textos siguen tan vigentes como en la época en la que fueron escritos. Puede que la España actual se parezca más de lo que pensamos a la de 1898.
Doña Perfecta es la historia de un pueblo y de sus gentes; de las personas que no están dispuestas a aceptar nuevas corrientes críticas con sus costumbres. En la sociedad de finales del s. XIX el pensamiento progresista iba contra todos los derechos adquiridos por los caciques y la iglesia. Ahora sólo pequeñas diferencias nos separan de ese tiempo.
La historia transcurre en Orbajosa, concretamente en el salón de la casa de Doña Perfecta. A ella llega desde la capital su sobrino Pepe Rey, un joven culto y moderno, con nuevas ideas. Su padre y su tía han concertado la boda entre los primos. Aunque no se conocían, entre ellos surge el amor. El joven comienza por revolucionar a uno de los estamentos más arcaicos del pueblo, la iglesia. Mantiene que su dominación se basa en la superstición y el sometimiento. El cura, que pasa el día en la casa de Doña Perfecta, no tiene argumentos para rebatirle y sólo consigue mofarse de él, acompañado por las chanzas de toda la familia.
Aquí empieza la pesadilla del joven, que intenta no molestar pero tras varios ataques acaba expresando todo lo que piensa de ellos. Así consigue poner a su dominante tía en contra. Ésta se toma la justicia por su mano y decide finiquitar el compromiso. Encierra a su hija y hace la vida imposible al sobrino. Éste es despedido de su prestigioso puesto estatal, es denunciado por vecinos del pueblo por un litigio de sus tierras, es conducido mediante engaños a la casa de unas jóvenes de vida alegre... Todo está permitido por la loable tarea de conseguir separarles. La tía toma estas medidas por el bien de los dos, imparte justicia sin contar con los sentimientos de los demás. no quiere a un ateo en su familia y sabe que su sobrino nunca se adaptaría al pueblo.
Mientras tanto, los rumores corren por el pueblo y todo se sabe. El joven, desesperado, acaba amenazando y haciendo confesar a su tía. Doña Perfecta reconoce que no quiere ver a su hija mezclada con un hombre como él y por este motivo urdió el plan. Desesperado y sin salida, Pepe parte, pero sabe que volverá a por la mujer que ama.
Ortigosa es un pueblo tradicional y rebelde, no está dispuesto a aceptar dictados de modernidad de la gran urbe. Así declara un levantamiento contra el poder central y desde allí son enviados los ejércitos para reprimirlo. Al mando está un general amigo íntimo de Pepe Rey. La familia de Doña Perfecta teme represalias, pero se pone en manos de Dios que sabrá protegerles. Y por si acaso, también en manos de un labriego conocido por su brutalidad. En medio de la batalla, el joven llega a la casa para llevarse a su amor, pero una bala disparada por el lacayo y ordenada por Doña Perfecta y el cura, acaba con su vida. Es el día más feliz y se convirtió el más triste en la vida de ambos enamorados.
La historia es interesante, clásica pero aplicable a la actualidad. En su segunda lectura Galdós nos está contando la situación de España, un país retrogrado con tintes de modernidad que siempre fueron reprimidos por los poderosos, con más miedo que otra cosa de perder sus privilegios.
La obra está bien representada aunque no llega a entusiasmar o alcanzar grandes momentos. Incluso en ciertas escenas llega a hacerse aburrida, seña clara de que la puesta en escena es mejorable.
Entre los actores hay variedad: los protagonistas trabajan bien, Alberto Jiménez especialmente (como suele pasar). Otros son de calidad mediocre.
El escenario es original; gira y con su movimiento nos sitúa en diferentes ambientes y momentos, siempre dentro de la casa.
En general es una obra entretenida por ser un clásico muy actual, aunque habría podido dejar un mejor recuerdo con algo más de trabajo. Espero acertar con la próxima del CDN.