El sirviente es la histroria de un joven acomodado y cómodo que vuelve a su ciudad natal, Londres, después de haber estado en primera línea de combate durante la segunda guerra mundial. Ha luchado contra la fuerza militar afrika korps, a las ordenes del mariscal Rommel, y demasiados horrores le han dejado marcado. Ahora en Londres sus contactos le intentan ayudar para que vuelva a recuperar su vida, así que le facilitan una entrevista para trabajar en la City.
A su llegada le reciben sus personas más queridas, su novia Susan y su gran amigo . Éste último volvió de la guerra un tiempo antes que él y para ayudarle en su reinserción a la vida normal le ha alquilado un apartamento y buscado un sirviente que le ayude con la casa.
Barret es el mejor en su profesion y así lo demuestran sus credenciales. Por este motivo ha sido elegido para servir al joven Tony. Éste le da instrucciones muy claras de lo que necesita: alguien que decida y resuelva en todas las cuestiones relativas a la casa y que no le moleste. Tony se ha convertido en una persona despreocupada, alcoholizada y vaga así que sin darse cuenta cada vez dejará que su sirviente ocupe más y más espacio en su vida y se haga imprescindible.
Durante una pequeña enfermedad Tony permanece en casa alargando la convalecencia y dejando que Barret le mime. Esta actitud no gusta en absoluto a su novia que preferiría que saliera de casa a luchar por su futuro. Cualquier decisión pasa por las manos de Barret que aprovechando las circunstancias se toma la libertad de disponer en lugar de transmitirlo a su señor.
Poco a poco los papeles de ambos van cambiando. Tony empieza a mostrar pavor de molestar a Barret y que este amenace con irse, así que le trata con sumo respecto y miedo, incluso cuando éste se ha propasado en sus tareas.
Poco a poco los papeles de ambos van cambiando. Tony empieza a mostrar pavor de molestar a Barret y que este amenace con irse, así que le trata con sumo respecto y miedo, incluso cuando éste se ha propasado en sus tareas.
Barret aprovecha su situación privilegiada para pedir a Tony que su sobrina venga a ayudarle. A Tony no le hace ninguna gracia pero acaba aceptando. La joven Vera se instala en el sótano de la casa días después. Una noche de borrachera Tony y su amigo bajan a la cocina y se encuentran a la chica. Su recato inicial se va convirtiendo en insinuaciones y acercamiento para el que Tony no estaba prevenido y acaba cayendo en las redes de ella. Su tío, que supuestamente estaba fuera disfrutando de su día de libranza, sale de la habitación cuando la chica por fin se queda sola, y le felicita por lo bien que ha salido todo.
A partir de aquí Tony solo vivirá para estar con la chica, aprovechará cualquier momento de salida de Barret para irse con ella. El resto le da igual, su novia, el trabajo, los amigos... Pero la supuesta sobrina tampoco lo es, ya que realmente es la amante de Barret y todo es una trama montada por éste para poder meterla en la casa.
Un día que Tony ha salido y vuelve a casa inesperadamente con Susan y su amigo, descubre que Barret y la chica estaban divirtiendose en su cuarto. Barret al verse pillado confiesa toda la verdad: su relación con Vera y su conocimiento de que Tony se acuesta también con ella. Y todo esto delante de su novia que abandona la casa llorando acompañada por su amigo.
Temporalmente todo vuelve a ser como antes, pero ya con las cartas encima de la mesa la relación de tres empieza a enrarecerse muy rápido. Barret se mofa de Tony por su inutilidad y dependencia, sabe que es un pelele en sus manos. Incluso un día que este baja a la cocina le insulta, le humilla y ataca llegando casi a asfixiarle. El amigo llega en ese momento y en un intento desesperado intenta llevarse a Tony, librarlo de esa red que le tiene atrapado y que va a acabar con él. Pero Tony ya estaba perdido desde hace mucho, y el único camino que es capaz de hacer es el que le lleva a la habitación donde le esperan Barret y Mabel.
La obra es un continuo juego de seducción posesión y humillación. Las relaciones personales que al principio eran fácilmente identificables como sanas se van deteriorando, corrompiendo y los personajes eligen esos caminos que les condenan. La manipulación es el arma que utilizan para hacerse con el control y romper con el orden establecido, el de las clases dominantes. El sirviente acaba siendo el amo y señor, imponiendo su decisión ante todo.
La historia está muy bien contada, consigue meternos en ese ambiente asfixiante en el que nos vamos ahogando poco a poco sin remisión. El escenario en cambio muestra el orden inverso, al comienzo se trata de una casa vacía e inhospita que se va transformando en un hogar gracias a Barret. Pero cada pequeña mejora que hace en la casa sólo sirve para atar y dominar más a Tony y a todos los que nos hundimos con él.
La obra es un continuo juego de seducción posesión y humillación. Las relaciones personales que al principio eran fácilmente identificables como sanas se van deteriorando, corrompiendo y los personajes eligen esos caminos que les condenan. La manipulación es el arma que utilizan para hacerse con el control y romper con el orden establecido, el de las clases dominantes. El sirviente acaba siendo el amo y señor, imponiendo su decisión ante todo.
La historia está muy bien contada, consigue meternos en ese ambiente asfixiante en el que nos vamos ahogando poco a poco sin remisión. El escenario en cambio muestra el orden inverso, al comienzo se trata de una casa vacía e inhospita que se va transformando en un hogar gracias a Barret. Pero cada pequeña mejora que hace en la casa sólo sirve para atar y dominar más a Tony y a todos los que nos hundimos con él.